lunes, 7 de mayo de 2012

Principios Biblicos

Debemos aplicar los principios Bíblicos.

La Biblia es llamada “Las Escrituras” o “El Antiguo y Nuevo Testamento” para indicarnos que en su esencia es un documento legal por la cual recibimos la herencia de nuestro Padre Celestial para nosotros sus hijos.
Dios nos ha entregado la Victoria en todas las áreas de la vida.
Cristo venció por ti y por mi.
Cuando hablamos de victoria hacemos referencia a una guerra ganada por Dios mismo al reino de las tinieblas. Y por tanto las Normas que deben ahora regir el mundo, están consignadas en Las Escrituras. (Estas legalmente son un título de propiedad entregado por el Señor para nuestro beneficio)
Jesucristo dice:
“Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo”. Juan 16:33
Tenemos que confiar en Cristo y Su Palabra.

·         Dios quiere lo mejor para nosotros.

Todo lo que Dios nos va dando en su Palabra es para que lo vayamos aplicando en todas las áreas de nuestra vida y para que llevemos una vida de excelencia.

·         Debemos proclamar la Palabra de Dios.

Los principios Bíblicos cuando los hablamos con fe, se activan, toman vigencia, empiezan a operar y nuestras vidas y las atmosferas se transforman favorablemente.
En el Reino de Dios podemos encontrar suficientes principios de sabiduría para aplicarlos con autoridad.
Como resultado va a ver vidas transformadas, puertas que se abren, caminos nuevos se iluminan y va a ir subiendo de nivel con Dios.
De esta manera usted irá viendo el respaldo de Dios cuando lo hace de acuerdo o en línea con la Palabra.
Las autoridades de una nación pueden establecer leyes y estas toman vigencia, son operativas a partir de su proclamación.
Tú como hijo de Dios y como embajador del Reino de los Cielos tienes la autoridad para decretar sobre este mundo, según los principios Bíblicos.
Es la Palabra de Dios, tú la declaras y lo que ella contiene, será hecho porque en ella hay poder.

·         A veces la Fe es probada por la Paciencia.

 Quizá usted se pregunte ¿mientras espero que se manifiesten las cosas prometidas en la Palabra, qué debo hacer cuando aparecen contratiempos o retrasos de aquello que estoy esperando recibir? 
 Ahí es donde tiene la oportunidad de afirmar su fe en Dios y en la Palabra para transformar esa situación en victoria y no resignarse a una vida sin resultados. 
A veces no vemos con la vista la solución al problema porque Dios quiere que tenga resultados en todas las áreas de su vida incluyendo la formación del carácter y la integridad como persona.

·         La Biblia nos muestra muchos personajes de Fe y otros en derrota.

Podemos encontrar en la Biblia personas que en sus vidas retrasaron algún proyecto divino, y tuvieron que estar fuertes en la fe y perseverar sabiendo que si Dios dijo que vendría ¡vendrá! 
Vemos personas que al empezar a desarrollar los planes de Dios sufrieron contratiempos y aunque uno no los esté esperando, aparecen. 
Pero Jesús dijo: “Confiad, yo he vencido al mundo.”
Él ha vencido y nos ha provisto la victoria. 

·         Tenemos el respaldo de Dios.

A veces son muchas las aflicciones que vive el justo, pero de todas ellas nos librará el Señor.
Algunas de esas personas permitieron que el retraso los destruyera pero otros creyeron en el respaldo de Dios y generaron grandes victorias.
Los que permitieron que se les destruyera dicen: “Esto no funciona, no vienen los resultados.” 
Pero si usted está firme y está creyendo en la Palabra de Dios,  aunque no vea todavía los resultados va a seguir haciendo todo a la manera de Dios, porque sabe que Dios no falla. 
 Usted va a producir victoria para su familia y va creando un futuro para ella.
Aplique los principios y espere el tiempo correcto: ¡Las soluciones van a venir a su vida! 
Usted va a ver el futuro de bendición para la gloria de Dios.
Todo lo que podemos ser, hacer, tener, poseer están fundamentadas en las Escrituras y toda situación diferente a esta es anti bíblica y diabólica. (Es vivir en desobediencia)
Mejor es que seas agradable a los ojos de Dios si haces justicia, siendo un proclamador y un ejecutor de las leyes Divinas. La Biblia dice que somos reyes y sacerdotes, tenemos autoridad delegada por Dios en el reino material y en el reino espiritual.